Un 19 de marzo

De 1851

Nacía Roque Sáenz Peña

Era hijo de Luis Sáenz Peña y Cipriana Lahitte, siendo sus abuelos partidarios de Rosas e integrantes de la Legislatura durante el gobierno del Restaurador de la Leyes.

Sus estudios secundarios los realizó en el Colegio Nacional de Buenos Aires y en 1975 se graduó en derecho. Al año siguiente fue electo diputado en la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires por el Partido Autonomista de Adolfo Alsina.

Llegó a ser presidente de la Legislatura, pero luego de disidencias con la política de Nicolás Avellaneda renunció y por algún tiempo se mantuvo alejado de la actividad política.

En 1879 viajó a Perú para ofrecer sus servicios en la Guerra del Pacífico. Ante esta actitud el Congreso de la Nación le quitó la ciudadanía argentina, para devolvérsela en 1880, año en que fue nombrado por el Ministro de Relaciones Exteriores, Bernardo de Irigoyen, como su secretario.

El 14 de marzo de 1882 es iniciado masón en la Logia Decente.

Con Juárez Celman como presidente, al que Sáenz Peña había apoyado, es designado embajador Plenipotenciario en Uruguay.

Más tarde representó a la Argentina, junto a Manuel Quintana en la conferencia de Washington y el 18 de abril de 1890 asume como Ministro de Relaciones Exteriores y Culto, cargo que desempeñó hasta su nombramiento como Presidente del Banco Nacional durante la presidencia de Carlos Pellegrini. La grave crisis económica nacional, sumada a los empréstitos contraídos, significaron el cierre de la entidad en 1893.

En las elecciones de 1892 era favorito para alcanzar la primera magistratura, pero una jugada de Julio Argentino Roca promoviendo como candidato a su padre, Luis Sáenz Peña, provocó que renunciara a la carrera por la presidencia.

Su padre es electo y lo designó Jefe del Regimiento de Guardias Nacionales además de incorporarse a la Cámara de Senadores de la Provincia de Buenos Aires, cargos a los que renunció tiempo después para alejarse de la vida pública.

Luego de un período políticamente convulsionado, donde los partidos vigentes hasta ese entonces, fundamentalmente el Partido Autonomista Nacional, y el crecimiento de la Unión Cívica Radical, sumado al fallecimiento de líderes políticos e ideológicos como Bartolomé Mitre, Manuel Quintana y Carlos Pellegrini, entre otros, lo ubicaron en un lugar de privilegio como candidato a la presidencia en 1910.

Cuando se llevaron a cabo los comicios Roque Sáenz Peña era embajador en Italia, pero aún así sumó 263 electores de los 273.

Para ese entonces, una de las grandes sus grandes preocupaciones era, además del fraude, la posibilidad de acercar la política a todas las clases sociales, que tuvieran participación cívica e intentar alejarlos de ideas anarquistas o socialistas.

Así se fue pergeñando la luego denominada Ley Sáenz Peña de voto secreto, universal y obligatorio, no sin la oposición de los conservadores, que veían de esa manera reducido su poder. La Ley fue aprobada y promulgada el 13 de febrero de 1912 y el primer lugar donde se puso en práctica fue en Santa Fe, provincia que había sido intervenida y en la que ganó por amplia diferencia la Unión Cívica Radical, partido que de esta forma volvía a participar en elecciones luego de un período de abstención.

Al momento de asumir como presidente, Roque Sáenz Peña, tenía muy deteriorada su salud, tal vez por sífilis que pudo ser contraída cuando estuvo en Perú, lo que provocaba que en reiteradas oportunidades solicitara licencias, hasta que más tarde renunció y delegó el mando del Poder Ejecutivo en su Vice-presidente Victorino de la Plaza. Falleció el 9 de agosto de 1914.

Roque Sáenz Peña (foto www.biografiasyvidas.com)